Un septiembre con
poco para festejar
Industrias icónicas de la región están contra las cuerdas. Buena parte de ellas fueron afectadas por la situación económica, con un mercado interno que no termina de repuntar, falta de competitividad exportadora y apertura de las importaciones. Otras, estrechamente ligadas al mercado interno, arrastran problemas por las políticas de precios controlados y una tercera franja es víctima de desmanejos empresarios y políticas hostiles de los gremios.
La coyuntura del mes de septiembre, marcada por la incertidumbre cambiaria y altas tasas de interés, amenaza profundizar situaciones de crisis que tienen impacto en el empleo.
La láctea Sancor fue intimada por la justicia a presentar un plan para salvar la quiebra.
La Papelera Celulosa permanece paralizada desde hace tres meses y sigue sumando pedidos de quiebra.
La cerealista Vicentin viene sumando deuda post concursal, mientras se espera una conclusión al proceso de convocatoria de acreedores.
La fábrica de maquinaria agrícola Vassalli, que venía de estrenar dueño en 2024, no puede ni siquiera pagar los sueldos y afronta un duro conflicto laboral.
Lácteos Verónica opera al 10% de su capacidad y tampoco puede afrontar los sueldos.
Algodonera Avellaneda trabaja al 20% y acusa recibo de la caída de producción, acosada por las importaciones.
Acindar trabaja al 50% de su capacidad, suspende personal y baja contratos, afectada por la caída de la construcción.
DATO CLAVE
Sancor, la láctea atraviesa una prolongada crisis y está al borde del ko.